En herramienta para la planificación del desarrollo socioeconómico en el municipio avileño de Chambas devendrá el Plan de Adaptación al Cambio Climático de esa localidad, documento que resultará del proyecto internacional Resiliencia Costera y su capacidad para aglutinar fuerzas en función de enfrentar condiciones ambientales adversas.

Yamilé Jiménez Peña, una de las coordinadoras de la referida iniciativa global en la provincia de Ciego de Ávila, enfatizó que ese instrumento, en fase de terminación, promoverá necesarios ajustes a un clima cambiante en diferentes sistemas económicos, sociales y ambientales.

Esto se suma a los empeños para fortalecer las capacidades en los actores del progreso territorial, gestionar los recursos necesarios y orientar los procesos inversionistas, a través de medidas dirigidas a reducir vulnerabilidades y prevenir posibles afectaciones por eventos hidrometeorológicos extremos, en una apuesta por un municipio más resiliente.

Las acciones que se proponen para la adaptación están en correspondencia con los planes Municipal de Adaptación al Cambio Climático (Tarea Vida) y de Reducción de Riesgos de Desastres, la Estrategia de Desarrollo Territorial y el Modelo de Ordenamiento Ambiental, que fueron concebidas con la participación de los organismos e instituciones representados en la localidad.

Para la conformación de estos documentos normativos, los especialistas tienen en cuenta los resultados de estudios de peligro, vulnerabilidades y riesgos (PVR) efectuados con una metodología actualizada que ofrece importantes detalles para materializar el plan a corto, mediano y largo plazos, según se manifiesten las amenazas.

Jiménez Peña precisó que no se trata de un plan puntual, sino integrador, que proyecta medidas que atañen a varios sectores, incluidos los priorizados, y servirá de guía para elaborar las estrategias de adaptación al cambio climático en los organismos e instituciones locales, de acuerdo con sus particularidades y los pronósticos.

Ejemplificó que la propuesta establece medidas encaminadas al manejo del agua, recurso natural empleado en diferentes actividades económicas y sociales, por tanto, se consideraron todos los sectores que pudieran afectarse con problemas asociados a la escasez, calidad y el suministro del vital líquido.

En consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el documento incorpora el enfoque de género, de manera que las acciones contemplan la participación de hombres y mujeres, en tanto, aseguran la igualdad de derechos y oportunidades en un complejo escenario climático.

Esa herramienta facilitará la toma de decisiones para orientar el progreso local, integrará la reducción de riesgos de desastres y adaptación al cambio climático, y reflejará la biodiversidad y los distintos ecosistemas con sus servicios, las comunidades y los sectores estratégicos, estos últimos convocados a unirse para afrontar los problemas ambientales y lograr un desarrollo sostenible.

Marcelo Agustín Castro, especialista de la Delegación Municipal de la Agricultura, subrayó que implementan soluciones de adaptación al cambio climático, como la siembra de cultivos más resistentes a las altas temperaturas y los prolongados periodos de sequía, en tanto, el  avance será superior al establecerse el plan sectorial.

Mariela Martínez Isaac, profesora del Centro Universitario Municipal (CUM), valoró la importancia de un plan de adaptación al cambio climático en el sector agropecuario, considerado el de mayor relevancia económica en el territorio chambero, así como la necesidad de lograr la soberanía alimentaria en situaciones complejas.

El CUM continuará su vinculación con esta tarea mediante el asesoramiento metodológico a los diferentes organismos y el desarrollo de investigaciones vinculadas a la adaptación al cambio climático en los sectores priorizados de la economía, dijo.