El ministro palestino de Salud, Majid Abu Ramadan, instó al mundo a detener la campaña bélica que desarrolla hoy el Ejército israelí en los territorios ocupados, en especial en Gaza, bajo fuego desde hace nueve meses.
Pedimos a las organizaciones sanitarias y humanitarias internacionales presionar a ese país para obligarlo a finalizar sus violaciones contra los centros médicos, grupos de rescate y ambulancias, señaló.
Abu Ramadan recordó que las leyes internacionales protegen al personal de salud y a sus equipos durante el cumplimiento de su deber humanitario de tratar a los heridos y enfermos sin obstrucciones ni agresiones.
Realizamos esfuerzos continuos y una coordinación permanente con todas las organizaciones sanitarias internacionales y amigos de otras latitudes para satisfacer las necesidades de los heridos y enfermos en la Franja de Gaza, subrayó.
Días atrás, el Ministerio de Salud palestino denunció que solo funcionan 15 de los 36 hospitales en ese enclave costero, aunque apenas de forma parcial.
En su habitual parte sobre la situación allí, la cartera alertó que esos pocos centros enfrentan una grave escasez de trabajadores y suministros médicos, incluidos anestesia y antibióticos.
Destacó que desde octubre del pasado año murieron medio millar de trabajadores del sector en ese territorio, cientos resultaron heridos y más de 300 fueron arrestados por el Ejército.
Los militares también destruyeron unas 130 ambulancias durante su agresión en curso contra la Franja, indicó.
Hace unos días, la Sociedad de la Media Luna Roja Palestina advirtió que la situación humanitaria en Gaza es catastrófica.
Casi toda la población de ese enclave costero sufre una grave inseguridad alimentaria, afirmó el organismo en la red social X.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura también alertó recientemente sobre el alto riesgo de hambruna que amenaza a los más de dos millones de palestinos que allí viven.