Hace 45 años reside en Cuba y a sus 60 de vida artística confiesa por qué se enamoró de este país, tanto como para traer su arte de Italia.
A propósito del reciente lanzamiento de su álbum Thanks, nueva propuesta fonográfica presentada por la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem), la artista relató a la Agencia Cubana de Noticias su historia y trayecto de Italia a Cuba.
Aquí he descubierto otra Lucía, confesó, no este personaje que caminaba el mundo con estilista de primera, en alta moda; me encontré a mí misma; me enamoré de Cuba, de la forma de ser de la mujer cubana, tan luchadora y empeñada en el desarrollo de su país, y yo quería ser como ellas.
Me quería sentir mujer y ser tratada tal cual, no como una muñeca que tuviera que hacer lo que decían y ser más apariencia e imagen que persona, y en Cuba han reconocido mi valor, que era lo que yo verdaderamente estaba buscando; por eso me apasioné por su ambiente, el público y de todo lo relacionado a la cultura cubana, agregó la entrevistada.
Su casa era el Hotel Habana Libre y no fue hasta 1990 que decidió quedarse definitivamente, dejando atrás su carrera en Italia para dedicarse a promoverla donde quiera que fuera.
Eran tantos viajes a Cuba que me cancelaron un programa, me pusieron a escoger y preferí sentirme realizada y logré vínculos musicales, comentó.
Según la cantante todos los artistas que ha traído han querido regresar y de forma gratis; tal vez Cuba no puede pagar todo su arte, porque tiene otras prioridades, pero sí aprecia lo que tiene y es agradecido.
Dijo, además, que Armando Hart, ministro de Cultura en aquel entonces, forma parte de sus 60 años de carrera; quien le ha dado la posibilidad de hacer estos intercambios culturales que realiza hasta hoy, y el maestro Adolfo Guzmán que desde el principio quiso que compartiéramos escenario juntos y fue todo un éxito.
La mujer de ayer y la de hoy
Las personas descubrieron más de mí durante la pandemia mediante internet, y muchos preguntan por qué no me he dado a conocer y es que no me interesa tanto Lucía Artieri como la música cubana y hacer cosas para Cuba; por eso no he buscado aquí lo que tenía en Italia, agregó.
A Lucía Altieri le gusta cantar desde pequeña, por eso no cree tener un inicio en la música, aunque recuerda cuando se presentó en el concurso Voces Nuevas y entre 10 mil concursantes resultó una de las ganadoras.
Entre las preguntas de ACN sobre qué la define hasta hoy, expresó su satisfacción sobre la manera de llevar adelante su carrera.
Estos 60 años los he vivido al máximo; la vida ha sido muy buena conmigo, he tenido éxito en todos los países que he visitado, estudié canto lírico y esto me ha dado la posibilidad de probar varios géneros, formarme profesionalmente, participar en varios festivales como el San Remo en Italia, el festival mundial de Río de Janeiro, entre otros eventos que hicieron de estos 60 años una película y yo solo puedo decir “Gracias”, como mi nuevo disco, confiesa.
Thanks, que traducido al español significa gracias, constituye un paradigma internacional; una selección musical que marca el cierre de un ciclo de mucho trabajo, mucha música, muchos éxitos, grandes escenarios, grandes orquestas, grandes directores y grandes músicos que han acompañado a Lucía, dijo la artista.
Son productos muy personales, resalta, me identifico en cada tema y pienso en las diferentes etapas de mi vida y lo que soy hoy.
Lucía Artieri, además de amar su profesión, dedica tiempo a sí misma; le gusta cocinar, estar en casa, recibir amigos, en ocasiones disfruta de momentos de soledad cuando tiene cosas que hacer, viajar principalmente a la Isla de la Juventud, Varadero, Santiago de Cuba donde ha hecho conciertos y televisión.
También, voy a Italia a ver a mi hijo y a mi nieto, pero siempre regreso porque Cuba se extraña y siento que cumplí mi objetivo al quedarme aquí y lograr estrechar lazos entre Cuba e Italia, confiesa.