La reunión del Grupo de Trabajo Ruso-Cubano sobre cooperación en la esfera de la ciencia, la tecnología y el medioambiente confirmó el alto nivel de los nexos bilaterales y el deseo de fortalecer la cooperación en el campo de la ciencia y la tecnología entre ambos países, destacó  la Agencia de Energía Nuclear y Tecnologías de Avanzada (Aenta).

En reporte publicado en su sitio web, la Aenta refirió que el encuentro se celebró este miércoles en una atmósfera de diálogo constructivo, amistad y comprensión mutua, y concluyó con la firma del «Protocolo del Grupo de Trabajo Sobre Cooperación en Materia de la Ciencia, la Tecnologia y el Medio Ambiente».

La cita, en esta capital, tuvo lugar en el contexto de la XX Sesión de la Comisión Intergubernamental Cubano-Rusa para la Colaboración Económico-Comercial y Científico-Técnica, que acontece este jueves.

Encabezó la delegación cubana Armando Rodríguez Batista, viceministro de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, y la rusa Piotr Aleksandrovich Kucherenko, secretario de Estado y viceministro de Ciencia y Educación Superior.

Según la Aenta, ambas partes reconocieron que los contactos entre sus organizaciones científicas se llevan a cabo en interés del desarrollo de la cooperación bilateral mutuamente beneficiosa y algunas promovieron el aumento de la interacción en diversas áreas de investigación.

Ratificaron que la realización de convocatorias de concursos de proyectos científicos con la participación de centros de investigación y universidades de la Federación de Rusia y la República de Cuba contribuye al mayor desarrollo de la cooperación bilateral en ese campo.

Además, reafirmaron su interés en continuar los trabajos en la dirección astronómica prioritaria de la cooperación ruso-cubana y subrayaron la necesidad de una financiación sostenible y oportuna de las obras y proyectos ejecutados.

Como de alta importancia consideraron el establecimiento de la colaboración científica con el Instituto Pushkov de Magnetismo Terrestre, Ionosfera y Propagación de Ondas de Radio de la Academia de Ciencias de Rusia, para profundizar en los estudios de variabilidad geomagnética, el sondeo ionosférico y la influencia de la actividad solar sobre Cuba, lo cual es muy necesario para el aseguramiento de las trasmisiones de radio y el pronóstico del clima especial.

También reconocieron la necesidad de continuar las negociaciones sobre el documento de proyecto de cuatro partes entre el Instituto de investigación científica de materiales aeronáuticos de toda Rusia, el Centro de estudios ambientales de Cienfuegos, y los ministerios de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, y de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera.

Abordaron la posibilidad de continuar los trabajos de la expedición paleontológica Conjunta ruso-Cubana de recolección y estudio de organismos fósiles en Cuba, con la ampliación de la geografía y la organización de nuevos destacamentos expedicionarios.

De igual forma las partes convinieron en la utilidad de estudiar la posibilidad de intensificar la cooperación científica bilateral en la esfera de la agricultura, especialmente la producción industrial de cítricos en interés de la sustitución de importaciones y la seguridad agrícola.

Ponderaron los resultados de la cooperación de la Universidad Federal del Sur con las universidades cubanas: de La Habana, de Ciencias de la computación, la Marta Abreu de las Villas, la agraria de La Habana, la Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría y la de Holguín.

En términos parecidos se expresaron en torno a la cooperación con el marco del Instituto conjunto de investigación nuclear, y señalaron el potencial de su desarrollo futuro, al igual que el aumento de la participación de científicos cubanos en los programas de investigación y capacitación que se llevan a cabo en ese colectivo.