El bolero de Cuba, género vocal, instrumental y bailable del movimiento de la canción, cumple hoy un año de integrar el catálogo de expresiones que conforman el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación.
La designación llegó en 2021 por el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural con la intención de contribuir a la sostenibilidad, visibilidad y viabilidad de esta manifestación de la identidad del país, la cultura popular y tradicional.
El acto de declaratoria se efectuó en los Jardines de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y, al decir del comité evaluador, la decisión representó un primer paso para postularse a la distinción de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.
La fecha coincide con el aniversario del natalicio del reconocido vocalista cubano Benny Moré, apodado “El Bárbaro del Ritmo” y devenido uno de los más importantes exponentes del género en la isla como Sindo Garay, Manuel Corona y César Portillo de la Luz.
Igualmente, el día escogido marca el nacimiento de otro gran defensor de estas sonoridades que tuvo por nombre de bautizo Luís Marquetti y se convirtió luego en el Gigante del Bolero, compositor y promotor de dicha expresión más allá de las fronteras cubanas.
México, Colombia, República Dominicana y Puerto Rico son algunas de las naciones que defienden también el bolero, sus rasgos de identidad musical códigos estéticos y estilo que determinan su autenticidad.
Entre las manifestaciones, eventos y expresiones que integran el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación se encuentra el changüí, el carnaval de Santiago de Cuba y las charangas de Bejucal.
Completan el listado el órgano oriental, la cocina criolla, los saberes de los maestros roneros y la fiesta de los bandos azul y rojo de Majagua.