En este momento estás viendo A Claudia la ciencia le tocó su corazón
El trabajo de laboratorio le apasiona/Foto: Tomadas de Internet

A Claudia la ciencia le tocó su corazón

Por ser tan joven, tímida y sencilla esta muchacha no revela a simple vista su ambición por atesorar conocimiento científico, como un capital intelectual que ella incrementa constantemente.

La avileña Claudia Linares Rivero en su adolescencia pretendió estudiar en la Universidad y con mucha perseverancia logró convertirse en Licenciada en Biología después, tras experimentos y aprendizajes, adquirió la   categoría de Investigadora del Centro de Bioplantas de Ciego de Ávila, donde trabaja desde el año 2014, y luego el título de Máster en Agrobiotecnología.

Todos esos méritos no fueron suficientes en su “codicia” profesional y le sirvieron para aspirar a un mérito bien alto y difícil de conquistar, pero con una dedicación y un empeño admirables, emprendió horas, días, madrugadas de estudio, investigación, trabajo de laboratorio y pruebas de campo, hasta culminar con el gran éxito de ser aprobada y nombrada Doctora en Ciencias Agrícolas.

El martes fue el gran acontecimiento y en la ocasión se anunció así: “En una excelente presentación y defensa la máster alcanzó el grado de Doctora en Ciencias Agrícolas con una votación unánime a favor. El Centro de Bioplantas felicita a Claudia y le agradece por su perseverancia y rigor durante su doctorado”.

La avileña en su modestia característica no hace privativo su reciente designación, por eso publicó en su perfil de Facebook: “Muchas gracias a todas las personas que estuvieron a mi lado durante este largo camino, camino difícil pero meta alcanzada. A mi familia, amigos, compañeros…el éxito no sería posible sin el apoyo y el amor de ustedes”, e insiste en su gratitud hacia su incondicional tutora, la Doctora en Ciencias Janet Quiñones.

También agradece mucho al Doctor en Ciencias Manfred Büchele director del Centro de Competencia Obstbau Bodensee (KOB), en Bavendorf, Ravensburg, Alemania, donde ha desarrollado, como parte de un equipo, una interesante investigación sobre el uso de pesticidas biológicos a partir de dos plantas: Moringa oleifera y Morinda royoc, conocidas como Moringa y Garañón. 

“Siempre me han gustado las plantas, los animales, la naturaleza en todas sus expresiones, de ahí que me sintiera a gusto los cinco años de estudio en la Universidad de Villa Clara, donde adquirí los conocimientos básicos para emprender una profesión difícil, pero apasionante”, refiere.

“La Universidad me dio formación, me enseñó a soportar largas horas de estudio, a prepararme, a ser una persona independiente, con objetivos, y Bioplantas es el lugar donde aprendo cada día a investigar, a hacer ciencia; me ha dado herramientas para crecer como investigadora”, dice con voz suave y tierna, características de su personalidad.

“Me gusta trabajar en la creación de plaguicidas a partir de productos naturales que no agredan el medio ambiente ni al hombre. Para eso es necesario tener conocimientos de fisiología, de la bioquímica de las plantas y hacer estudios previos”, confiesa la joven investigadora, ya  calificada como Doctora en Ciencias.

A ella le seduce el proceso de investigación, que a veces le demanda de pasar noches y madrugadas vigilando las reacciones de las pequeñas plantas con las que hace experimentos. No se desanima cuando un estudio bioquímico no da el fruto esperado y entonces insiste con otras técnicas, en la búsqueda de un resultado favorable.

En su quehacer cotidiano entre el laboratorio y las plantaciones le queda poco tiempo y lo ocupa en estudiar, ir al gimnasio, ver películas, compartir en familia y cuidar de su pequeño jardín, en especial de sus adoradas violetas.

La comunidad científica de Ciego de Ávila acaba de ganar una profesional con la más alta calificación e integrada a la causa mundial de crear alimentos de la tierra genéticamente mejorados.

A Claudia la ciencia tocó su corazón y ella le es recíproca, entregándole su talento, esfuerzo y tiempo para contribuir a que la tierra aporte cosechas superiores y las plantas crezcan sanas y fuertes para bien de la sociedad que las consumen.

Deja una respuesta