La celebración este jueves, en La Habana, del Consejo Nacional de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) marcó el comienzo del proceso hacia el X Congreso de la organización que acontecerá en el mes de junio del presente año.
De acuerdo con Luis Morlote Rivas, quien cesó este jueves en sus funciones como presidente de la Uneac, la principal motivación de la vanguardia artística cubana rumbo a su magna cita es la máxima del sabio Fernando Ortiz cuando expresó que “la cultura es la Patria”.
Consideró que con el Consejo Nacional efectuado este jueves se pautaron las ideas y propuestas de trabajo de la Uneac durante el quinquenio que se inicia.
Morlote Rivas calificó a los diálogos de la membresía de las cinco asociaciones de la organización como profundos, pues salieron a flote problemas, soluciones, desafíos, aspiraciones, sueños y modos en que los escritores y artistas pueden ayudar al país a superar las coyunturas más desafiantes.
Resulta una necesidad impostergable contribuir de manera más activa al perfeccionamiento de nuestra política cultural y de las instituciones que tienen la responsabilidad de materializarla y atender y dialogar con los creadores, así como de promover la participación protagónica de la población, señaló.
Para este creador es primordial establecer relaciones entre las transformaciones materiales con el fomento de la espiritualidad y, en consecuencia, dinamizar procesos que den lugar a una elevación constante del nivel y las expectativas de vida de los ciudadanos desde su comunidad.
Dijo que es urgente combatir con mayor eficacia los intentos por dividir a Cuba y el impacto de la oleada globalizadora neoliberal en la sociedad, lo cual se logra con el enfrentamiento a la seducción de los medios hegemónicos que persisten en la inoculación de antivalores culturales de la ideología y las industrias culturales foráneas.
El Consejo Nacional que pone el punto de partida al X Congreso de la Uneac es, en palabras de Morlote Rivas, una vía para el fortalecimiento y crecimiento del tejido espiritual de la nación.
La convocatoria al cónclave constituye una motivación muy especial para los escritores y artistas que integran la organización en todo el país, quienes ponen en evidencia su compromiso de robustecer y renovar la Unión creada por Nicolás Guillén, el Comandante en Jefe Fidel Castro y una pléyade de intelectuales de primera línea, en 1961, aseguró.
Resaltó, finalmente, el apoyo de la máxima dirección del Partido Comunista de Cuba (PCC), del Gobierno y del sistema institucional de la cultura en las soluciones a los problemas que emanaron del IX Congreso en 2019 y de algunos que aún permanecen sin respuestas.
Expresó que la supervivencia del proyecto social cubano pasa hoy por ratificar el papel decisivo de la cultura como en otros momentos cruciales de la Revolución, en los cuales la Uneac y sus miembros han demostrado que se trata de una organización viva, beligerante, activa, comprometida y necesaria.
Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central del PCC y jefe del Departamento Ideológico, manifestó que el X Congreso tiene que ser un debate de todo el pueblo por su cultura y en la que la institucionalidad revolucionaria acompañará a los creadores que hacen posible que el tejido espiritual de la nación se fortalezca.
Esa importante cita acontecerá en La Habana entre el 28 y el 30 de junio para conmemorar los 63 años de las históricas “Palabras a los intelectuales” de Fidel, que fueron los cimientos de la política cultural cubana.