El proyecto de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA, por sus siglas en inglés) —concebido para el mejoramiento del suministro de energía eléctrica en Isla de la Juventud— fue oficialmente transferida a Cuba, en acto presidido por el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz.
Alfredo López Valdés, director general de la Unión Eléctrica, agradeció al gobierno japonés y a su agencia internacional el donativo, consistente en la instalación de baterías con capacidad significativa de almacenamiento, esencial para mantener el equilibrio energético, especialmente con la integración al sistema de energías renovables.
La experiencia de esta inversión millonaria será de mucha utilidad para la construcción de otras obras similares en el sistema eléctrico nacional, a tenor de la transformación de la matriz energética en Cuba. La materialización del proyecto constituye una muestra del continuo fortalecimiento y de las excelentes relaciones entre ambos países, dijo López Valdés.
Ashida Tatsuya, representante residente de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón en Cuba, dijo que la obra inaugurada es resultado del trabajo conjunto de especialistas de varias compañías japonesas y empresas cubanas, gracias a la cual se podrá incrementar en 15 MW la penetración de fuentes renovables de energía en Isla de la Juventud.
A través de este proyecto el gobierno de Japón coopera con su par de Cuba en el esfuerzo a fin de estabilizar el suministro de la energía, especialmente por el uso de paneles fotovoltaicos, por lo cual se espera que los equipamientos donados sean aprovechados al máximo, enfatizó Hirata Kenji, embajador de ese país asiático en La Habana.
Con este proyecto queremos enviar un mensaje que el pueblo cubano no está solo, tiene muchos amigos en el mundo y entre ellos está el pueblo japonés, acotó.
En nombre de Cuba y de Isla de la Juventud, Ernesto Licea Mojena, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular, agradeció al pueblo nipón por la moderna tecnología donada, gracias a la cual se planea incorporar 15 MW adicionales al sistema, alcanzando aproximadamente el 20 por ciento de producción de energía con estas fuentes.
De manera informal, Marrero Cruz se dirigió a los presentes para agradecer al gobierno de Japón y a su embajador, reconocer a todo el equipo de profesionales, ingenieros cubanos, japoneses, al Ministerio de Energía y Minas, la Unión Eléctrica y a los trabajadores de la empresa eléctrica local, protagonistas de la obra, cuya experiencia se pretende extender al resto del país.