Organizaciones sindicales de Argentina participan hoy en el segundo paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) contra las políticas del presidente Javier Milei.
La acción de protesta durará 24 horas y tiene consignas como La patria no se vende y Milei para la mano.
Además de todos los sectores que integran la CGT (comercio, construcción, camioneros, bancaria, estatales, metalúrgicos, sanidad y docentes, entre otros), se sumaron la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) y la CTA-Autónoma.
También participan afiliados a gremios del transporte, terrestre y aéreo, por lo que se espera la paralización de medios como el subterráneo capitalino, el servicio de trenes y ómnibus, e interrupciones en los vuelos de Aerolíneas Argentina que ya canceló 191.
En un comunicado conjunto, la CGT y las dos CTA señalaron que el paro tiene como objetivo defender los derechos laborales, sociales, previsionales y sindicales, y exigir un salario digno.
Además, denunciaron el ajuste llevado a cabo por el Ejecutivo en el nombre de la libertad de mercado, el cual afecta especialmente a los sectores de menores ingresos, la clase media asalariada, los jubilados y pensionados.
Estamos frente a un gobierno que promueve la quita de derechos, redefine el rol del Estado, cierra y achica a su mínima expresión importantes dependencias e instituciones que brindan asistencia a nuestra población y provoca miles de despidos, indica el texto.
Asimismo, denuncia las privatizaciones, la entrega de los recursos naturales, la paralización de la obra pública, el desfinanciamiento de la seguridad social, la salud, la educación, la ciencia y la cultura.
También condenan los aumentos incesantes de los precios de los alimentos, medicamentos y servicios esenciales.
Un 31 por ciento de caída real de las partidas presupuestarias de jubilaciones y pensiones, un 87 en obras, un 39 en subsidios al transporte, un 76 en las transferencias a las provincias, un 18 de recorte a las universidades y un 13 a programas sociales, son algunos de los indicadores que ponen en evidencia que el ajuste no lo paga la casta, sino los sectores más vulnerables, apunta el documento.
Ante tal escenario, asegura que el movimiento obrero está organizado junto al pueblo, unido y de pie.
Reafirmamos nuestro compromiso y derecho a participar en el diseño de la sociedad a la que aspiramos. Esta es una jornada de resistencia y reclamos por las necesidades que deben ser atendidas y reparadas. Los derechos no se venden. La patria se defiende, concluye.
El 24 de enero, a 45 días del inicio de la gestión de Milei, miles de ciudadanos inundaron la capitalina Plaza del Congreso y otros espacios de varias provincias argentinas como parte del primer paro realizado por la CGT contra las medidas del Ejecutivo.
Como en aquella ocasión, los trabajadores rechazan también un protocolo antiprotestas, un decreto de necesidad y urgencia y un paquete de normativas presentados por el Presidente para reformar o derogar más de 300 leyes, otorgarse facultades legislativas, privatizar empresas y cambiar el sistema laboral, entre otras disposiciones.