Una cálida felicitación transmitió este domingo la coordinación del proyecto internacional Mi Costa, en la provincia de Ciego de Ávila, a los formadores que intervienen en el proceso de fortalecimiento y creación de capacidades para la adaptación al cambio climático (CC) en siete comunidades vulnerables del litoral sur de Cuba.
A propósito del Día del Educador, Alejandro González Díaz, líder en el territorio avileño de esa iniciativa global financiada por el Fondo Verde para el Clima y el Gobierno de Cuba, expresó su agradecimiento por la dedicación a procesos formativos y trabajos de campo que contribuyen a sembrar en las comunidades una semilla de amor y compromiso para promover la sostenibilidad ante el CC.
«Su labor en educación ambiental es fundamental para construir un futuro más sostenible y resiliente», a través de un proyecto que ejecuta acciones técnicas en humedales costeros y fomenta los conocimientos para afrontar con éxitos los efectos de las variaciones climáticas.
Instó a continuar trabajando para proteger los ecosistemas y enfrentar los desafíos del CC en zonas bajas del litoral sur cubano, amenazadas por el aumento del nivel del mar.
González Díaz agasajó en esta fecha a los profesores de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso)-Programa Cuba, quienes guían el proceso de fortalecimiento y creación de capacidades de Mi Costa, estructurado en 11 módulos que promueven conocimientos y habilidades para el monitoreo de ecosistemas marino-costeros y comunitarios, y ofrecen herramientas para la reducción de riesgos y vulnerabilidades.
Dichos entrenamientos también ayudan a construir una perspectiva de inclusión y equidad de género para la adaptación al CC, además de desarrollar habilidades para el análisis básico de las dinámicas sociodemográficas y socioeconómicas, y propiciar la obtención creativa de fundamentos teóricos-metodológicos de la Educación Popular.
Los preceptos participativos y transformadores de la Educación Popular, orientan un programa de habilitación de formadores, que apuesta por la progresiva transferencia de saberes a actores de gobierno y sectores socioeconómicos, grupos poblacionales y el personal técnico que, como parte de Mi Costa, ejecutará acciones encaminadas a la restauración de humedales.
Flacso-Programa Cuba aludió al aprovechamiento de los recursos endógenos de los territorios para alcanzar las metas del proceso formativo, de manera que los conocimientos fluyan hacia las comunidades, a través de personas con posibilidad de transmitir los contenidos y atendiendo a las especificidades de los contextos locales.
Desde el nivel nacional acontecen procesos educativos en los que intervienen formadores de los diferentes municipios y sitios de intervención implicados en el proyecto, quienes tienen la misión de apropiarse y adecuar los conocimientos, y articularse con otros promotores de saberes para crear comunidades de aprendizaje.
Para la transferencia de conocimientos a más de medio millón de pobladores, residentes en 24 municipios del sur de Cuba, incluidos los habitantes de siete asentamientos del litoral, Mi Costa creó condiciones en los centros de creación de capacidades del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) en esas localidades y habilitó aulas anexas con tecnología de punta para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
A través de las redes sociales de internet de Mi Costa, Marta Rosa Muñoz Campos, directora de Flacso-Programa Cuba, felicitó al equipo de formadores y auguró éxitos para un proyecto con un fuerte componente de formación.
Con apoyo financiero del Fondo Verde para el Clima e implementado por la Agencia de Medio Ambiente del Citma y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), entre otras instituciones cubanas, el referido proyecto internacional se propone crear condiciones de resiliencia al CC, a través de soluciones de adaptación, basadas en fortalecer los servicios que brindan los ecosistemas costeros.
Eso incluye mejorar la salud de los bosques de manglares para asegurar la protección de la zona costera ante eventos meteorológicos extremos.
A lo largo de la costa sur, para ecosistemas y comunidades los desafíos del CC han dejado de ser una cuestión de futuro al crearse una alianza entre personas de ciencia e ingeniería, representantes gubernamentales y activistas comunitarios, decididos a comenzar a trabajar para reducir vulnerabilidades, comunicó recientemente el Pnud.