Próximo a celebrar su 30 aniversario de fundado, el Centro de Bioplantas de Ciego de Ávila afianza sus proyectos de investigaciones agrícolas y exhibe importantes resultados de los mismos.
Por estos días, en su quehacer diario, lo más notable es la alianza creada con el Instituto Tecnológico de Tuxtla Gutiérrez (TecNM campus Tuxtla), que es una pequeña universidad pública de tecnología, perteneciente a Chiapas, México.
Esta institución, según sus objetivos, crea alianzas internacionales con estudiantes para la realización de proyectos con impacto ambiental positivo y que al mismo tiempo sean beneficiosos para la sociedad.
La piña, producto emblemático de la provincia avileña, es el tema que ocupa este intercambio, favorable para ambas instituciones.
Y precisamente de esa fruta, lo que ha constituido un anhelo de investigadores del Centro de Bioplantas ya es realidad, al lograr vitroplantas de piña de la variedad Piña Cabezona de calidad superior, pues son plántulas de 250 gramos para su siembra en campo con fertilización potenciada a base de microorganismos eficientes, según aseguran los especialistas.
Al respecto, ya en Bioplantas se alista un lote de la quinta variedad de la Piña Cabezona para su siembra, a cargo del Proyecto Territorial de Diversificación de la Piña en la Empresa Agroindustrial Ceballos.
Además, la semana que termina se produjo una incorporación masiva de trabajadores de este centro de la agrociencia a la cosecha de la Flor de Jamaica para su comercialización en el centro del país, lo cual constituye un aporte económico para financiar más investigaciones.
La Flor de Jamaica es una planta con propiedades que benefician la salud y su consumo se recomienda para atenuar varias dolencias.
El Centro de Bioplantas de Ciego de Ávila se acerca a sus 30 años de fundado en un momento en el cual consolida sus objetivos de trabajo y dispone de un grupo de investigadores de alto nivel profesional, lo cual posibilita hacer ciencia en favor de una agricultura más eficiente.