El presente año 2025 es decisivo para el futuro derrotero de la comunicación social en Cuba, toda vez que la gestión comunicacional, constituye un pilar para la gobernanza del país, a la par que otros procesos medulares como la informatización de la sociedad y la aplicación de la ciencia y de la innovación tecnológica.
La comunicación social transversaliza dichos procesos, razón por la cual, la puesta en vigor de la Ley de Comunicación Social 162/2023 y de sus normas complementarias (Decreto 10/2024 y Decreto 102/2024) no pueden quedar en letra muerta.
Se trata de una norma jurídica novedosa, cuyo principal contenido es, sin lugar a dudas, el derecho ciudadano de acceso a la información, incluida la articulación del sistema de comunicación social del país desde los ámbitos organizacional, mediático y comunitario.
La implementación adecuada de la Ley de Comunicación Social garantizará la unidad en el activismo revolucionario en todos los ámbitos, destacó Alfonso Noya Martínez, presidente del Instituto de Información y Comunicación Social de Cuba (ICS).
El proceso de capacitación del capital humano ha sido hasta ahora el saldo principal de la Dirección Provincial de Información y Comunicación Social en el territorio, entidad que promovió la impartición de un diplomado en la Universidad de Ciego de Ávila Máximo Gómez Báez, así como la inserción del estudio de la normativa en la formación de pregrado de las carreras humanísticas.
En coordinación con la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales (ACCS) se ofertará este año un curso sobre la Ley de Comunicación Social para los nuevos actores económicos del sector no estatal, cuyo protagonismo en la vida socioeconómica del país no es nada despreciable.
Desde la unidad y el diálogo se puede generar consenso argumentó Alfonso Noya Martínez, quien anunció que durante el mes de febrero se iniciará en el país la segunda etapa del proceso de educación para la comunicación como una de las prioridades estratégicas del Estado y del Gobierno.
Esta tarea formativa incluye, por supuesto, la alfabetización en materia de gestión comunicacional en los escenarios digitales para el fomento y desarrollo de una mayor participación ciudadana y de un mayor control popular.
Para orientar el consumo responsable, Xenia López González, directora general de Publicidad y Patrocinio del ICS, subrayó la importancia de articularse más coherentemente con las las Oficinas de Ordenamiento Territorial (INOTU) y de la Administración Tributaria (ONAT) en cada municipio.
Tanto la radio como la Televisión Avileña tienen como reto asumir, con condiciones tecnológicas y capital humano, acciones concretas de publicidad y de patrocinio como parte del experimento de la prensa cubana, cuyo único exponente en la provincia este periódico Invasor.
Los debates durante las asambleas de balance anual de la radio y de la televisión avileñas apostaron por ganar a más audiencias juveniles, hacer corresponder sus agendas mediáticas con las agendas públicas y, por ende, propiciar una mayor participación ciudadana.
En un mundo globalizado con tanta mentira organizada y la verdad cada vez más dispersa, los servidores públicos y los medios de comunicación tendrán que romper con las inercias institucionales, a la vez que contribuir a la generación de consensos en base a la unidad del pueblo por un mejor país “con todos y para el bien de todos”.