Cuba adelanta hoy una estrategia dirigida a eliminar la transmisión de la lepra, una dolencia curable, poco contagiosa y con un periodo de incubación de cinco años como promedio.
Entre las prioridades están actualizar el programa nacional contra esa enfermedad, fortalecer la vigilancia, mejorar la prestación de los servicios, capacitar de forma continua al personal sanitario, a los pacientes, a los familiares y a la comunidad en general.
Desde 1962 la mayor de las Antillas cuenta con un proyecto para combatirla, y en 1993 la lepra dejó de ser un problema de salud.
Cada año se notifican nuevos casos en todas las provincias, en uno y otro sexos, y a cualquier edad, con un promedio de 180 personas por año.
Puntualiza el diario Granma que se transmite por vía respiratoria y por contacto con las lesiones de la piel de un enfermo no tratado, tras una relación íntima y repetida.
El periodo de incubación es de cinco años como promedio, pero puede ser desde dos y llegar hasta 20, precisa el rotativo citando al ministerio de Salud Pública.
El tratamiento consiste en una terapia multi-droga con Rifampicina, Clofazimina y Dapsone, que demostró una tasa de curación en el país del 98 por ciento.