Uno de los factores que más contribuyen al incremento de la caza furtiva de aves silvestres, es el agravamiento de la situación económica del país unido a la flexibilidad, por parte de las autoridades, a la hora de hacer cumplir las leyes que regulan esta compleja situación medioambiental.
Así lo considera Odey Martínez Llanes, especialista de la Empresa para la Protección de la Flora y la Fauna en la cayería norte de Ciego de Ávila, quien asegura que el incremento de los precios es uno de los detonantes para que más personas encuentren en la comercialización de aves silvestres una forma de ganar dinero sin tener en cuenta el daño que le causan a la biodiversidad.
A ello se añade la falta de rigor al hacer cumplir las leyes establecidas para estos casos, situación muchas veces motivada por el desconocimiento, la permisibilidad o la falta de compromiso, por lo que ya se ha vuelto común encontrar un número creciente de personas con mariposas, negritos, azulejos o sinsontes enjaulados, algunos de los cuales se encuentran en peligro de extinción.
Es por ello que resulta necesario actuar a todos los niveles para comenzar a crear en las personas una comprensión adecuada sobre las consecuencias de este problema, de manera que se entienda que mantener a las aves silvestres en cautiverio es uno de los factores que desde hace años afecta a la biodiversidad y ha sido incluso responsable de la extinción de numerosas especies dentro y fuera de Cuba. (Escrito por LLamil Ruiz González)