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Roberto Castillo: 30 años de arte, humor y versatilidad

Roberto Castillo «Castillito» es un nombre que resuena con fuerza en el panorama artístico, particularmente en Ciego de Ávila, su tierra natal. Con una trayectoria de 30 años, este talentoso artista ha demostrado ser un verdadero camaleón escénico, destacándose como actor, humorista, músico, fonomímico, promotor cultural y director de programas.
Su versatilidad y dedicación lo han consolidado como una figura emblemática de la cultura avileña y un referente en el humor de la isla.
Desde sus inicios, Castillito mostró un talento innato para la interpretación y el humor. Su capacidad para conectar con el público, a través de personajes entrañables y situaciones hilarantes, lo convirtió rápidamente en un favorito del público.
Su humor, inteligente y sutil, aborda temas cotidianos con una mirada aguda y crítica, pero siempre desde el respeto y la empatía. Desde el 2014 está vinculado a los programas dramatizados de la emisora Radio Surco.
Más allá del humor, Roberto Castillo ha demostrado ser un artista integral. Su habilidad para la fonomímica, con la que recrea voces y personajes con una precisión asombrosa, es uno de sus sellos distintivos.
Su pasión por la música se refleja en sus espectáculos, donde a menudo incorpora elementos musicales y canciones que complementan sus actuaciones.
Además, su faceta como director de programas demuestra su visión integral del mundo del espectáculo y su compromiso con la calidad en cada proyecto.
Durante sus 30 años de carrera, ha participado en numerosos festivales, programas de televisión y radio. Su trabajo ha sido reconocido con diversos premios y distinciones, que dan fe de su talento y dedicación.
Sin embargo, más allá de los reconocimientos, su mayor recompensa es el cariño y el respeto de su público, que ha seguido su trayectoria con admiración y lealtad.
En resumen, Roberto Castillo es mucho más que un humorista; es un artista completo, un creador de emociones y un embajador de la cultura avileña.
Su trayectoria de 30 años es un ejemplo de dedicación, talento y amor por el arte, que merece ser celebrada y reconocida por todos. Su legado es un tesoro invaluable para la cultura y una inspiración para todos aquellos que sueñan con vivir del arte.
Forma parte del colectivo de la Empresa Comercializadora de la Música y los Espectáculos (MUSICAVILA), donde es comunicador institucional.

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