En cumplimiento del compromiso común asumido por las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y del Acuerdo de Paris, Cuba elaboró su primer documento del Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (GEI), correspondiente al periodo 1990-2022.
Lo enunciado consiste en hacer un balance entre la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos y removidos de la atmósfera por un país (parte) para un lugar determinado y en un tiempo dado, generalmente correspondiente a un año calendario.
Al impartir una conferencia sobre el tema en el Seminario Taller de Contaminación Atmosférica Contat 2025, la doctora Rosmary López Lee, Investigadora Titular y jefa del Centro de Contaminación y Química Atmosférica CECONT, del Instituto de Meteorología, destacó la importancia de ese reporte en la toma de decisiones para implementar acciones de mitigación de los impactos del cambio climático, porque identifica los sectores y actividades responsables de las principales emisiones y absorciones de GEI.
Igualmente, permite establecer metas y objetivos concretos en materia de mitigación, hacer un diagnóstico del estado ambiental del país, diseñar políticas climáticas eficientes, contribuir al desarrollo sostenible y diseñar estrategias de descarbonización.
Según recalcó la también profesora Titular del Instituto Superior de Tecnologías y Ciencias Aplicadas (Instec), el inventario mostró que los sectores con más emisiones de gases de efecto invernadero en la mayor de las Antillas son por ese orden el de la energía, la agricultura y el de los desechos, generados por numerosas fuentes.
Las sustancias contaminantes monitoreadas fueron el dióxido de carbono, el metano y el óxido nitroso, siendo la primera el principal GEI emitido.
