Por insignificante que parezca, hoy 60 gramos pueden marcar alguna diferencia entre un día y otro para los avileños. Ese es el peso actual del “pan de la cuot gga”, debiera. La panadería La Especial incumplió este parámetro recientemente.
Luego de la denuncia de la población, dicha panadería del centro de la ciudad de Ciego de Ávila fue inspeccionada por el grupo de enfrentamiento municipal. En efecto, los consumidores tenían la razón.
Durante la comprobación se detectaron panes por debajo de la norma del Ministerio de Comercio Interior, de 35 a 42 gramos, dijo a este medio de prensa el director provincial de Inspección, Rafael García Fernández.
En tanto, el director de la Unidad Empresarial de Base de la Industria Alimentaria de Ciego de Ávila en el municipio cabecera, Ramón Arrizabalaga García, plantea que si bien los panes tenían un peso inferior al establecido, la diferencia no era tan notoria.
A cuenta de la mencionada violación ―explicó García Fernández―, fueron aplicadas cinco multas por 8000 pesos cada una, según lo que rige actualmente el inciso b) del artículo 7 en el Decreto 30 sobre actividades de precios minoristas.
Tal infracción es más grave todavía teniéndose en cuenta la inestabilidad en la producción y la siempre cuestionada calidad. A pesar de ello, el pan de 75 centavos es una opción para muchos frente al alto costo en las formas de gestión no estatal.
Además, hace menos de un año, la dirección nacional de la Industria Alimentaria redujo de 80 a 60 gramos el peso del pan normado a partir de la baja disponibilidad de harina de trigo en el país. La medida tuvo como intención que el consumidor pudiera comprar el producto a diario. Los efectos continúan sin ser perceptibles.
De acuerdo con las palabras de Arrizabalaga García, el gramaje del referido producto tiene un margen. O dicho en números, puede pesar 55 gramos o 65 gramos. En los últimos días, no siempre el proceso de elaboración se pudo realizar en La Especial por falta de fluido eléctrico ni la calidad de la harina importada es la idónea. Ambos factores, justifica, pudieron influir en la disminución del peso.
Otra de las irregularidades encontradas fue que los especialistas designados para velar por la calidad y el gramaje no ejercieron como correspondía su labor. Intensificar los mecanismos de control desde lo interno ha de ser de las principales medidas a ejecutar tras lo sucedido, pues aunque la contravención haya sido detectada en La Especial, puede reiterarse en el resto de las 11 panaderías de la capital avileña, y otras tantas de la provincia.
Después de reunirse para analizar esta infracción, el consejo de dirección de la Industria Alimentaria en Ciego de Ávila también impondrá sanciones al administrador de la entidad, al maestro panadero y demás trabajadores implicados. (Autor: Arley Puyol Álvarez)
