La Vicepresidencia de Bolivia descarta hoy cualquier vínculo del vicemandatario, David Choquehuanca, con Peter Erlwein Beckhauser, generador de un terremoto en el sistema de partidos con denuncias para que esas organizaciones políticas pierdan sus personalidades jurídicas.
Un comunicado oficial “(…) advierte a la opinión pública sobre la circulación, en diversas plataformas digitales, de contenidos absolutamente falsos que intentan vincular al ciudadano Peter Erlwein Beckhauser con esta Institución y con el vicepresidente del Estado (…)”.
Añade que esas versiones carecen de todo sustento documental y persiguen el evidente propósito de confundir, desacreditar y erosionar la confianza ciudadana en nuestras autoridades”.
Sostiene que Erlwein Beckhauser “nunca ha suscrito contrato, prestado servicios ni mantenido vínculo alguno -formal o informal— con la Vicepresidencia”, y que el vicepresidente “no conoce personalmente al mencionado ciudadano”.
Este individuo vinculado a la derecha de Santa Cruz fue el promotor de la denuncia en contra del Frente Para la Victoria (FPV) y del Partido de Acción Nacional Boliviano (PAN-BOL), cuyas personalidades jurídicas fueron canceladas por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), con la consiguiente exclusión de la posible candidatura presidencial del exmandatario Evo Morales de cara a los comicios de agosto próximo.
Asimismo, el autodenominado “activista” presentó una denuncia en Beni contra el Movimiento Tercer Sistema (MTS), fuerza principal de la Alianza Popular, y esta demanda mantiene en un limbo la candidatura a presidente del representante del sector indígena campesino Andrónico Rodríguez.
Erlwein Beckhauser fue propuesto por el bloque opositor Creemos para integrar las listas de candidatos a diputados en la Alianza Unidad, del millonario Samuel Doria Medina, quien lo apartó con la acusación de ser infiltrado del Gobierno a partir de fotos en las que aparece con un poncho al lado de Choquehuanca.
Según el “activista”, la foto fue tomada de forma casual el 6 de octubre 2022, cuando su entonces pareja Yajaira San Martín Crespo juró como vocal titular del TSE, junto con Nelly Arista Quispe.
La vicepresidenta de PAN-BOL, Ruth Nina, acusó públicamente a la vocal San Martín de suministrar información sobre los partidos políticos a su exesposo, la cual este individuo utiliza para judicializar el calendario electoral.
En este contexto, la Vicepresidencia advirtió que la propagación de noticias falsas, la manipulación de contenido y la difamación están tipificadas como delitos en el ordenamiento jurídico boliviano y son penadas por la ley.
Igualmente, la Vicepresidencia se reservó el derecho de iniciar acciones penales en esa dirección.