eherán reafirmó este martes su decisión de continuar el enriquecimiento de uranio “según sus necesidades” y sin aceptar condiciones externas, en una nueva escalada de tensiones con la comunidad internacional. La declaración fue realizada por Aleaddin Boroujeri, miembro del Parlamente iraní, quien defendió el programa nuclear del país como un derecho legítimo respaldado por el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).
“Irán ha pagado un precio muy alto: nuestros científicos nucleares fueron asesinados, nuestras instalaciones atacadas. A partir de ahora, enriqueceremos uranio según nuestras necesidades”, sostuvo el legislador.
Añadió que el país podría alcanzar niveles de enriquecimiento del 90, necesarios, según dijo, para usos civiles como el combustible de buques de gran calado. “Y sin duda lo haremos”, aseguró.
Boroujerdi remarcó que la única línea roja sigue siendo la fabricación de armas nucleares, prohibida tanto por el TNP como por una fatua del líder supremo, el ayatolá Alí Jameneí.
El anuncio coincidió con la entrada en vigor de una ley que suspende formalmente toda cooperación entre Irán y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). La medida responde a los recientes ataques contra instalaciones nucleares del país, cuya autoría no ha sido confirmada, pero que Teherán atribuye a potencias extranjeras.
“El Parlamento ha votado detener la colaboración con la OIEA hasta que se garantice la seguridad de nuestras actividades nucleares”, escribió en redes sociales el ministro de exteriores, Seyed Abbas Araghchi.
También responsabilizó directamente al director del organismo, Rafael Grossi, de la “situación sórdida” y cuestionó su insistencia en visitar los sitios afectados, sugiriendo que sus motivos podrían ser “malintencionados”.
Con esta nueva fase de tensión, Irán se distancia aún más del marco de supervisión internacional sobre su programa nuclear, lo que incrementa la preocupación en Occidente respecto a una posible escalada regional. Mientras tanto, Teherán insiste en que sus avances nucleares persiguen exclusivamente fines pacíficos.
Irán denuncia daños en sus instalaciones nucleares por ataques de EEUU
El ministro de Exteriores de Irán, Seyed Abbas Araghchi, denunció en entrevista con CBS News que las instalaciones nucleares del país sufrieron graves daños a causa de los ataques de Estados Unidos.
“Lo que sabemos hasta ahora es que las instalaciones [nucleares iraníes] han sufrido graves y severos daños”, declaró, señalando en especial el complejo de Fordo entre los más fuertemente afectados por los bombardeos estadounidenses.
Aún no se ha determinado con exactitud el alcance del impacto y, por el momento, se desconoce qué ocurrió exactamente en el sitio de Fordo, señaló el alto diplomático iraní. Sin embargo, confirmó que la Organización de Energía Atómica de Irán ya está llevando a cabo una evaluación técnica para determinar la magnitud de los daños.
El canciller también indicó que, hasta ahora, no es posible saber si esto permitirá una reactivación de las instalaciones en el futuro. “Debemos esperar a que lleguen los informes [de las evaluaciones técnicas] para saber si estos sitios podrán volver a operar”, explicó.
A pesar de la gravedad de lo ocurrido, Araghchi subrayó que Irán no tiene intenciones de desarrollar armas nucleares. Recordó que el líder supremo del país, el ayatolá Alí Jameneí, ha emitido una fetua —un decreto religioso— prohibiendo el uso y la producción de este tipo de armamento.